¿Qué desarrollos tecnológicos estarán relacionados con esta tendencia?
Puesto que es una tendencia conductual, cabe destacar que su alcance va más allá del enfoque de la tecnología. Sin embargo, en este área podemos ver una relación más humanizada de procesos tecnológicos en su conjunto.
Si pensamos en el público masculino, veremos la creación de aplicaciones para padres que se preocupan por el cuidado de sus hijos de una manera más profunda y humanizada. También podemos pensar en accesorios wearables que potencien este nuevo enfoque en la relación entre padres e hijos, que, en Brasil, durante mucho tiempo, estuvo solidificada en un modelo patriarcal machista.
En el desarrollo de moda, los cambios ocurren tanto de forma sutil –desarrollo de piezas neutrales o con referencias más masculinas en el campo de accesorios para niños (por ejemplo: cintas, bolsas de bebé, carros...)–, como en el propio armario masculino que comienza a familiarizarse con la estética sin género (genderless), así como con la creación de accesorios del universo femenino para el masculino.
En los cosméticos, las inversiones en tecnología son notables en las investigaciones que comienzan a obtener más resultados con pruebas en hombres. Además, en este sector los brasileños avanzan un promedio de crecimiento del 11,2% por año, según Euromonitor. Un ejemplo de ello es el nuevo lanzamiento de BASF, el activo dermatológico Speci´Men™. Según Univar, este es el primer ingrediente activo desarrollado específicamente para la piel masculina, que cuenta con más densidad de colágeno que la femenina.
En los espacios donde el hombre está más presente, debemos considerar cambios que abarquen un perfil de hombre que también se encarga de sus hijos. Pensar en los estadios de fútbol con aseos familiares o cambiadores de pañal en los aseos masculinos, barberías que contemplen a los hijos de los clientes o no les importe invertir en un espacio sin género.